En esta ocasión, trabajamos en una residencia de dos plantas con castillete situada en el mítico barrio de Santa Cruz en pleno corazón de Sevilla, a pocos metros de la Catedral.

Nuestro objetivo principal consistió en reconvertir la residencia en tres apartamentos turísticos diferenciados, para estancias vacacionales.

Realizamos una pequeña reforma donde mantuvimos los elementos estructurales, se adaptaron las instalaciones y finalizamos con acabados de primera calidad.

En este proyecto hemos querido jugar con lineas sencillas y elementos funcionales, dando un mayor protagonismo a los detalles. Para conseguirlo, utilizamos el blanco como elemento principal que nos aportaba luminosidad, amplitud y frescura en cada estancia y añadimos piezas decorativas de gran atractivo para conseguir el efecto deseado.

En estos ambientes, el estilo nórdico del mobiliario se mezcla con elementos de la antigua vivienda consiguiendo un eclecticismo donde lo antiguo y lo nuevo se mezclan en una simbiosis que nos deja inquietos por descubrir más.

No podíamos terminar nuestra descripción sin agradecer al cliente su colaboración y cercanía en todo el proceso de creación, lo que ha ayudado a que este proyecto se logre, aportando además ideas propias que han resultado ser un éxito.